Corazón Vasija

Cuentan por ahí
que un cántaro rebelde
resistía el paso de los años
y las aguas.

Nacido de horno de barro,
humo de cigarro
amor cálido de leña
fuego lento
manos dulces de leche
formaron la tierra mojada

Vasija millones de veces llenada,
vaciada.
Exhausta de su barriga de agua

Los niños
que son los únicos que ven la realidad
le sobaban la guatita
"Gracias vasijita, por esta agua tan rica".

Desde el pozo, el cántaro
miraba el cielo nocturno
soñando con las estrellas
y cada noche bailaba
con el agua ensimismada

Un buen día,
alcanzó el valor necesario
y se volteó.

El agua lo llenó presurosa
y él crujió de felicidad
las estrellas estaban en su vientre
en el agua de su vientre.

- El que no se arriesga no cruza el río -
el pequeño cántaro
nunca supo del agua traicionera
que apenas lo llenó
lo hundió hasta el fondo,
rompiendo la cuerda
que lo llevaba a los niños

El viejo pozo,
testigo noble de todo el barullo
escucho las plegarias del Cántaro
y su gemido torció sus milenarios cimientos.

:-"Pequeño Cántaro "
pronunció ronco el viejo pozo
tendrás una última oportunidad
tu plegaria me ha conmovido

Y el pequeño cántaro
se anidó en el pecho del hombre
que antes deambulaba sin rumbo
por estos parajes.

Desde su nuevo pozo,
nuestro pequeño cantarito
mira por las fauces que son los ojos
las estrellas de Neruda titilantes a lo lejos

El hombre soñador
saco las cuentas necesarias
y construyo
primero un mirador
luego una escalera
para subir al cielo.

Pero pasó la tragedia
y el pobre hombre y su cántaro
se encontraron de frente
con el cálido amor rumoroso

Cántaro apenas recordaba lo anterior
pero sintió como antes,
al mecerse bamboleante
con el amor primoroso

El olvido se casó con las estrellas
Y el recipiente humano, que es el corazón
buscó la vida en sus ojos,
los de ella,
El universo eterno
en su mirada
la de ella
la paz cálida de sus manos de leche
las de ella

FINAL 1:

Una noble noche

similar a la noche del naufragio
El cántaro latiendo enérgico
era un horno de barro
humo de cigarro
amor cálido de leña
fuego lento
manos dulces de leche
formaron la tierra mojada,
hicieron
el amor.

La escalera en el patio, blanca hasta el tope
vigila el juego de niños
que corren alegres
contando vasijas.

El mas pequeño
en brazos del padre
escucha atento una historia
de amores y vasijas
y el niño
que es el único realmente ve
le soba la barriguita
"Gracias vasijita, por esta vida tan rica".


FINAL 2:

El cántaro no sospechaba
nunca supo del amor traicionero
que apenas lo llenó
lo hundió hasta el fondo,
"Con escaleras no tocas estrellas"

El hombre y su pecho desconsolado
El hombre soñador
saco las cuentas necesarias
y construyó
primero unas palabras
luego una poesía.

Y así va la vida
con amores rotos como vasijas
con vasijas destrozadas como corazones
con corazones acumulando ruinas.

Esta noche
en algún lugar
un pecho se desvencija
y corazón vasija
sueña con estrellas
que alcanzar.

Razón para que los años sean hermosos

Para Paulina Santos Cerda

En algún momento a alguien
se le ocurrió que las cosas se repetían

La furtiva sombra del Mamut cuando dormía
era la misma al día siguiente. Tic-Tac

Y con esa regularidad, aplacamos la soledad.
Tic-Tac

Aquel hombre, la encerró en un reloj. Y así, sin preguntar,
embarcó a la humanidad en la nave del gran truco
que es el tiempo

Un gitano aburrido inventó los años.
Felices, alegres, doloridos y los años perdidos. Tic-Tac

Otro alumbramiento,
otra muerte,
nacieron con un Tic
murieron con un Tac

Un aborigen validó todo, para que frases y libros fueran escritos:
"20 años no es nada", "cien años de soledad", "Las mil y una noches".

El aborigen miró al cielo, y el más grande de los humildes, dejó a los Santos replicar:

"El tiempo es tiempo para que la muerte fuera derrotada"

Uno de ellos, humanizado, atontado
ha relatado lo que en la tierra el tiempo es
y para quién continúa:

"Del tiempo, nada tengo en contra
gracias a él, termina todo, lo sé
quizás es un problema de diseño
pero es por su existencia, que lo caducado
todavía huele a actual

Puedo dar gracias a él
más que a mis propias acciones
más que a mi respirar forzado
y mis torpes manos
sabes, estas se hacen ágiles
cuando todo es recuerdo

¿Quién sabe cuál es verdaderamente
la realidad que me tocó?
El tiempo será llamado al estrado
testigo omnipresente, de lo material
pero incapaz de registrar
esas ciertas cosas, esas que te hacen más grande
de lo que para el tiempo serás

Y así, con tu ausencia
es como mejoras con el tiempo
tu presencia, por otra parte
logra un crecimiento desmesurado
de tu figura hecha de números"

Así las cosas siguieron repitiéndose
hasta que otro Santo bajó

Dos muñecas para Pascua

"Pocos son entre los hombres los que llegan a la otra orilla; la mayor parte corre de arriba a abajo en estas playas."

Siempre trato de explicar porque hago tales o cuales cosas, a veces dejaba pasar las micros sin motivo, me quedaba mirando la gente esperar su transporte a casa con cara de "quiero un te" o "como estará mi marido". Antes, después de un día de lluvia todo brillaba, el olor a tierra me estimulaba, sentía el correr de la vida, un soplo. Los niños eran fuente de alegría y la primavera de esperanza, todas esas pajas cursis que uno vive cuando hay algo dentro, algo mas que este cuerpo hediondo que usa este espacio, sin sentido aparente. La realidad me golpeó, ya no me acuerdo cuando, una tarde, caminando por este barrio de mierda, supe que mi padre había muerto, de una bala perdida, en un tiroteo de narcos.
En realidad siempre me sentí solo, él era mi única real conección con el mundo, ya estaba un viejo, no lo suficiente, pero debía ayudarlo en algunas tareas del hogar, los únicos momentos al mirar atrás que conservo con algo de cariño.
Podría decir que mi tarea en la vida ha sido solo una, el escapar del dolor, que es como un lunar grande, en el pecho, un lunar negro con pelos rizados y grasosos, del que no puedo escapar, salvo por momentos.
Lo poco que ganaba recogiendo las latas, lo ahorraba para un carro nuevo, donde ampliar mi rubro a los papeles y cartones. Claro el trabajo dignifica al hombre, pero nunca es suficiente, y una cajita de vino ayuda bastante, aunque no me dignifica tanto, me ayudaba a pasar las frías mañanas, y llenaba este vacío, con lo que casi el lunar desaparecía, un momento, haciéndose pequeñiito, y se parecia casi a una peca en los mejores momentos.
Pero luego de un tiempo, el lunar se puso morado, y ya era resistente al vino y a toda clase de licores fuertes, el universo giraba en torno a mi, con sus grandes pepas mirándome, cual faroles naranjas, en los peores momentos, el lunar era tan grande como el mismo universo, y tapaba los faroles. Nunca entendí como los demás podían soportar cada día, por un lado estaba la soledad estentórea, esa de la que todos luchan en algún sentido, y por otro lado estaba la desdicha profunda de saber que la vida no va para ninguna parte, y la gente se agrupa en torno a su amor propio, y se casan y conviven en torno al fueguito del amor propio, y dicen amar porque se hacen felices, llenando el globito de amor propio, sacando sus títulos y sus carreras, llenando el carro con sus mercaderías de amor propio, yo veo como crece su lunarcito de egoísmo, tapando el lunar del dolor, alisando sus pelitos, secando la grasita.
El amar se perdió en una de las vueltas de ciclo directo al sol, yo creo que cuando murio mi madre. Claro la actitud de madre es la mas cercana, sufren dolor para dar vida, pero la concepción igual es a través del líquido sexo, coronado por el placer, llenando de semen la vagina del amor propio.
Recuerdo que mi madre me enseño algo de religión, del dios de los cielos, y el hijo venido a tierra, de amar al prójimo como a uno mismo, ese Dios era inteligente, suponiendo que exista o existió, sabia que los humanos aman en base al amor propio, y el primer paso para el amor de las familias de mantequilla en los reclames, es el cuchillo rascando la manteca del egoísmo.
Preferí salir de esas vueltas de tuerca, y soportar el dolor, negandome a los analgésicos que me ofrecía la vida, pero pasó lo peor, lo que me tiene aqui escribiendo, el egoísta amor guiño su par de ojos, y el lunar era casi un punto negro. Se llamaba María José, y era preciosa, como todas las María José.
Una vez cuando pequeño, me hablaron de Jesús, y su inmolación por la humanidad. Si el dolor ha de salvar, ofrezco mi lunar entero, que ahora casi desaparece, al igual que mi vida en estos ríos de sangre de mis muñecas, por primera vez soy feliz, y es tiempo entonces de marchar, en este acto que salvara a la humanidad del egoísmo,

soy el cordero de la nueva pascua...